Ellos también son nuestros Santos

En el Día de Todos los Santos recordamos a los seres queridos que ya no están con nosotros, les rendimos homenaje y les enviamos nuestro cariño, estén donde estén. Los animales de compañía son, en muchos casos, considerados parte fundamental de nuestros núcleos familiares. ¿Es el duelo que pasamos por su pérdida similar al que sufrimos con los seres humanos? La respuesta de los expertos es contundente: sí, puede serlo.

La escritora y especialista en estos duelos Laura Vidal, autora del libro 'Cuando ya no estás', confirma que las mascotas son consideradas una parte más de la familia debido al vínculo que se crea entre el animal y la persona. "En muchos hogares los animales forman parte de la dinámica familiar. Se les quiere, respeta y tiene en cuenta como un miembro más de la familia", afirma Vidal. Es esta relación tan especial la que hace que el vacío que dejan tras su muerte desemboque en un proceso conocido como duelo, que no es exclusivamente humano.

¿Cómo podemos superar la muerte de nuestra mascota?

Según Laura Vidal, el primer paso es el de "ser consciente de que el duelo que vamos a vivir va a ser proporcional al amor que teníamos por nuestro compañero peludo". Es por ello que debemos darnos permiso para llorar o estar tristes, pasando por cada fase del proceso.

"Realizar rituales puede ayudar a digerir o asimilar lo que ha sucedido, desahogarse y, lo más importante, entender que, aunque tu ser amado ya no esté, esa relación basada en el amor sigue viva y le acompañará para siempre", recomienda Vidal.

El Día de Todos los Santos o Día de los Difuntos es un buen momento para realizar algún acto en honor a nuestros animales. "Puede ser muy positivo para quien esté transitando el duelo o para aquellos que ya lo tienen asimilado pero siguen amando y recordando a su amigo cada día".

El duelo por un animal, proceso incomprendido

En este proceso de duelo todavía hay muchos tabúes sociales. Quienes no han sentido este vínculo tan especial con un animal, no suelen comprender el dolor de quien lo padece, y tienden a restarle importancia, hiriendo los sentimientos de quien atraviesa esta etapa con comentarios desafortunados.

Por esta razón, son muchas las personas que padecen este sentimiento sin exteriorizarlo por temor a no ser comprendidos. Lo más importante es que, si estás pasando un mal momento por la muerte de tu mascota, sepas que ese sufrimiento es parte del proceso y que debes permitirte llorar o estar triste cuando lo necesites.

Los expertos recomiendan pedir ayuda psicológica si se siente que la tristeza perdura en el tiempo o que se requiere de apoyo para superar la pérdida. Puedes dedicar un espacio de tu casa como recuerdo a ese ser querido o realizar algún ritual de despedida. Lo más importante es que no ocultes el duelo y que te apoyes en quienes te hacen sentir comprendido y querido. El amor que sientes por él siempre estará contigo.